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Factores a Controlar en el Cultivo interior Hidropónico de Marihuana: Solución nutriente

plántulas de marihuana en un cultivo interior hidroponico de cannabisYa recomendamos utilizar las soluciones nutrientes hidropónicas que podemos encontrar a la venta en los cultivos de interior hidropónicos de marihuana. Éstas contienen todos los nutrientes de forma equilibrada y los micronutrientes necesarios para una excelente absorción por parte de nuestra planta de marihuana. Además, es muy aconsejable comprar una buena solución nutriente, de calidad, pues así evitaremos la acumulación de impurezas que provocarían desequilibrios en nuestro cultivo de interior hidropónico y por lo tanto, un tiempo extra de mantenimiento.

Como control preventivo que nos puede ahorrar muchos problemas cambiaremos la solución nutriente periódicamente, dependiendo del tamaño de nuestro cultivo de marihuana hidropónica. Así, la solución debería cambiarse semanalmente en cultivos normales y cada dos semanas en cultivos con depósitos grandes, pero si estamos ante la floración de la marihuana, la demanda de nutrientes por parte de ésta será mayor y conviene cambiar la solución nutriente más a menudo.

También es conveniente lavar el cultivo con solución nutriente muy diluída ( a una cuarta parte) entre cada cambio de  la solución para eliminar el exceso de fertilizantes. Si nos arriesgamos apurándola demasiado se pueden producir desequilibrios que estancarían el crecimiento de la planta de cannabis en interior y nos quitarían tiempo. Recuerda que en hidroponia todo es más rápido y podemos sobrefertilizar o matar de hambre a nuestras plantitas en un descuido.

El desequilibrio de nutrientes también  Leer más »

Fertilizantes y abonos para cultivar marihuana

marijuana y abonoLa marihuana necesita que le ayudemos a desarrollarse aportándole abono, pero debemos ser cuidadosos porque un exceso puede hacer que obtengamos el efecto contrario. Los fertilizantes para la etapa de crecimiento pueden quemar las hojas de la planta y dañar sus raíces si se utiliza en la altas concentraciones y con demasiada frecuencia.

La mayoría de los sustratos que podemos comprar tendrán bastantes nutrientes para que la marihuana crezca adecuadamente, y se pueden empezar a usar tras las primeras 3 semanas de crecimiento, por lo que no debemos añadir abonos al cannabis hasta el final de la tercera semana. Podemos, eso sí, usar durante las primeras 3 semanas abonos expecíficos para potenciar el desarrollo de las raíces.

Lo más importante a recordar es introducir el uso de los fertilizantes progresivamente. Hay que comenzar con una solución bastante diluida del abono y aumentar gradualmente la dosis. Hay muy buenos fertilizantes para la marihuana Leer más »

El agua

El agua es la vida para la marihuana.

Debemos tener especial cuidado con el agua con la que regamos nuestra plantación. El agua que proviene del grifo, el agua corriente, puede contener gran cantidad de sales disueltas y un ph demasiado bajo o demasiado alto para que las plantas absorban todos los nutrientes que se encuentran en el suelo.

El ph ideal se encuentra generalmente entre niveles de 6 y 7. En este rango la planta es capaz de absorber todos los nutrientes que requiere. Un ph inadecuado provoca que algunos de los elementos que la marihuana necesita no sean asimilados, presentando diversos problemas que harán que no desarrolle todo su potencial. Es muy importante que regulemos el ph del agua de riego con correctores de ph, para asegurarnos que las plantas puedan captar todos los nutrientes imprescindibles para su crecimiento y floración.

Una gran cantidad de sales disueltas en el agua evitarán que el cannabis chupe toda la necesaria, y puede hacer incluso que nuestra planta pierda agua por las raices por el fenómeno fisico-químico de la osmosis: el agua tiende a igualar los niveles de sales entre la tierra y las raices. En este caso, al haber más sales fuera de las raices que dentro, para igualar la cantidad el agua fluye de la planta a la tierra, disminuyendo el total de agua dentro de la planta aumentando la concentración de sales en el interior, y disminuyendo así la concentración en el exterior. Una buena ayuda para la planta es que la tierra donde esté plantada tenga un buen drenaje; y hay que tener especial cuidado cuando cultivemos en contenedores, porque las sales pueden acumularse y convertirse en un problema (estrés sódico), y quitarles a las raíces su habilidad para absorber agua.

El mejor agua que existe es el agua de lluvia. Esta (si no proviene de lluvia ácida, en cuyo caso también tendríamos que regular su acidez), tiene niveles neutros de ph y poquísimas sales disueltas (las que haya podido recoger en el ambiente en su caída desde las nubes al suelo). Una buena práctica consiste en regar abundantemente de cuando en cuando con agua de lluvia o agua destilada. Una proporcion de referencia sería tres litros de agua por cada litro de tierra. Con esto conseguiremos lavar la tierra de sales y equilibrar el ph de la tierra. Otro consejo es el de mezclar el agua del grifo con agua de lluvia si es posible, con el objetivo nuevamente de bajar la concentración de sales.

En el momento de germinar las semillas y en los primeros días de vida de las plantas (se llaman plántulas en este periodo) es imprescindible usar agua destilada o de lluvia. El cloro afecta negativamente a las raíces llegando incluso a quemarlas, o evitando que las semillas germinen y desarrollen su primera raiz. Otra acción que podemos llevar a cabo con la que conseguiremos que el agua del grifo baje su nivel de cloro, es la de llenar un bidón con este agua y dejar que se evapore el mismo durante uno o dos días.

Si tenéis la posibilidad recoged siempre agua de lluvia mediante canalones, etc,o si usáis aire acondicionado usad el agua destilada que producen (¡¡también vale para la plancha!!) siempre que esté bien limpia y clara. En caso contrario se puede comprar agua destilada, destinándola para el momento de germinar y hacer crecer a las plántulas y para regar el cultivo antes de cosechar y lavar así la tierra.

 

agua y nutrientes, absorción dependiendo del ph