Free marketing tools

Cultiva.me | Cultiva tu marihuana!!    
 

Cuando trasplantar las plántulas de marihuana

Cuando las plantitas germinadas recientemente ya han desarrollado un par de hojas, se encuentran lo suficientemente fuertes y han creado un mínimo sistema de raices como para asegurarles su supervivencia al transplantarlas a una maceta pequeña. Contrariamente a lo que mucha gente cree, es mejor realizar un par de transplantes a las plantas de cannabis para forzar al sistema de raices a que no se haga ‘vago’. Si plantamos a nuestro pequeñito ejemplar en la final maceta en la que va a crecer y a florecer, las raices se extenderán principalmente hacia abajo pero sin llegar a una gran y fuerte ramificación. Sin embargo, si forzamos a la planta a que primero explore todo el espacio que tiene para arraigar en una maceta pequeña, después en una más grande, y finalmente en la maceta donde desarrollará los cogollos, conseguimos que las raices se vean forzadas a buscar los nutrientes y se creen más ramificaciones bajo tierra (y consecuentemente más superficie mediante la que alimentarse), y se aproveche mejor la tierra y los abonos con los que se complemente su desarrollo. plántulas de marihuana Nunca olvidar que tampoco debemos frenar excesivamente el crecimiento. Esto se consigue mediante la observación frecuente de las plantas (una de las causas de que se entanque en crecimiento es la necesidad urgente de un transplante). Y teniendo en mente una sencilla regla que nos marcará los momentos en los que realizar los transplantes: La planta de marihuana tiende a crecer lo mismo bajo tierra que sobre ella, lo que quiere decir que sus raices tienen la misma profundidad que altura tenga el ejemplar. Por eso siempre es aconsejable que las macetas que usaremos en los transplantes sean más hondas que anchas, hasta que la planta cambiada a la maceta más grande como último paso. Así que cuando la planta comience a tener más altura que la maceta, ya sabemos que desde ese momento estamos haciendo trabajar a las raices. Como excepción hay que mencionar que en los cultivos de guerrilla, al aire libre y con las plantas arraigadas en tierra, por supuesto no hace falta seguir este planteamiento. Pero ese es otro tema que trataremos en otro post.

Hembra y macho

¿Por donde empiezo?
Opiniones y opiniones, muchas veces que se contradicen unas a otras. Esto es con lo que nos encontramos cuando hablamos de marihuana. Y dudas. Montones de dudas que asaltan a los principiantes y a los que no lo son tanto. Y uno de los temas estrella, es el de las hembras y machos. ¿Los machos se fuman? ¿Como sé qué planta es hembra, y cuál macho? ¿Qué posibilidades tengo de que mis hembras sean fecundadas por un macho? ¿Cuando los separo? ¿Qué hago con los machos? ¿Es malo hacerse tantas preguntas?
Para esta última cuestión, hay una respuesta rápida: No, claro que no.
Sexo:
Las plantas de marihuana tienen sexo, como cualquier otra planta. Los cogollos son el resultado de la floración de los individuos femeninos. Si han sido polinizados tendrán semillas. En caso contrario, serán los buscados ejemplares ‘sinsemilla’. La planta puede ser masculina, femenina o hermafrodita. Las que proporcionan la cantidad de resina necesaria para un gran índice de THC son las femeninas. Los machos son los encargados de fecundar a las hembras, y producirán los racimos que contienen el pólen necesario para su misión. Cabe destacar que una sóla rama con flores masculinas (sí, también se llaman flores), es suficiente para fecundar a varias hembras. El caso más extraño, no por ello difícil de que se produzca, es el de una planta hermafrodita. En este caso, lo normal es que la planta desarrolle flores femeninas excepto en alguna rama, que tiene flores masculinas, lo que puede dar al traste con esta planta y con la cosecha. Decimos que dará al traste porque ser fecundada gastará gran parte de sus energías en crear semillas, encontrándonos después con muy poca resina en comparación a una planta ‘sinsemilla’.

Hay que extremar las precauciones con los machos. Su pólen puede ser transportado por el viento varios kilómetros. Por lo tanto no sirve sólamente separar machos y hembras. En cuanto se identifiquen los machos, hay que cortarlos y dejar únicamente a las hembras como las reinas de nuestra cosecha. En una pronta identificacion evitaremos además gastar fertilizantes y preventivos en plantas que no queremos, puesto que el contenido en THC de los machos se localiza principalmente en las hojas, y es muy inferior que el de las hembras.

¿Cómo es una hembra?
Para detectar una hembra, no será necesario esperar hasta que la planta tenga cogollos. Antes de que la plante comience a fabricar los cogollos, la planta nos da una señal mostrándonos su sexo. Cuando lo planta alcance un palmo de altitud aproximadamente, depende mucho, podremos observar en las intersecciones del tallo principal con las ramificaciones dos "estigmas" de color verde que habrán salido hace tiempo, pues entre el tallo y cada estigma es donde aparecerá el primer indicio del sexo de nuestra planta. Si en esa zona aparecen dos pelillos de color blanco o incluso rojo, que salen de una bolsita alargada verde nuestra planta será con total seguridad una hembra. A partir de allí y más adelante saldrán los cogollos, que serán acumulaciones de estos pelillos con sus bolsas recubiertas de resina.
¿Cómo es un macho?
Si en la misma intersección, que he detallado en el apartado anterior, aparecen unas cuantas bolitas, que irán creciendo y agrupándose en racimos como si de una vid se tratara, entonces nuestra planta será un macho.No nos debemos apresurar demasiado en detectar los machos y matarlos, ya que al principio nos podemos confundir fácilmente si la flor es muy pequeña. Además, donde primero podremos distinguir el sexo es en la parte más alta de la planta, que es donde va desarrollándose más la planta y en donde salen los primeros indicios. El inconveniente está en que en esa zona todo es muy pequeño y está muy apretujado de modo que es difícil apreciarlo con claridad. Deberemos entonces esperar a que la planta crezca un poco más.

Los pelillos blancos que nos permiten distinguir a las hembras son los que luego formarán los cogollos.Hembra que ha mostrado su sexo y que ha empezado a cogollar rápidamente. Foto de cultivo en interior.

Una hembra de marihuana
Una hembra de marihuana
Diferencias
Una hembra de marihuana
Foto de macho: Podeis ver la bolita alargada que sobresale por el costado de la nueva ramificación, la señal de que es un macho.
Foto de macho: Otra perspectiva de la misma planta. Cuando han salido las dos primeras bolas por cada lado saldrán muchas más.
Macho de marihuana
Macho de marihuana
Macho: Aquí se ve como han salido ya un monton de bolitas.
Hembra: Los dos pelillos saltan a la vista.
Macho de marihuana
Hembra de marihuana