Más de 3 millones de plantas comestibles crecen en la tierra pero no hay otra cuya fuente de alimentos pueda competir con el valor nutricional del cáñamo.

De hecho, una sola semilla encierra una buena proporción de alimento y alta digestibilidad, los ocho aminoácidos que apoyan la síntesis de la proteína principal y la acción del sistema inmune, una combinación única en el mundo de las plantas para satisfacer las necesidades la nutrición humana.
Esta combinación es capaz de proporcionar al organismo la base sobre la cual crear otras proteínas como las inmunoglobulinas, anticuerpos que rechazan las infecciones antes de que aparezcan los primeros síntomas.

Entre todas las plantas, las semillas de cáñamo muestra un increíble equilibrio en la relación entre los ácidos grasos esenciales Omega-3 y Omega-6 (contiene 55% de ácido linoleico y ácido linolénico 25%). Con mucho, el porcentaje más alto y el mejor valor nutricional en un solo alimento. Estos ácidos grasos esenciales son los responsables de nuestra respuesta inmune.

Pero por qué es tan importante la reducción de grasa en la dieta? Más de la energía concentrada, la razón por la cual los seres humanos necesitan consumir grasa, es la adquisición de cantidades suficientes de los dos ácidos grasos esenciales LA y LNA, por lo que son llamados “esenciales”, mientras que los otros son simples “ácidos grasos”. Las fuentes moderna típica son las comidas con grasa utilizada en la industria alimentaria (aceite de maíz, palma, soja) son tristemente deficientes o carentes de ácidos grasos esenciales ya que se las somete a tratamientos térmicos y químicos, así como también hidrogenados, que eliminan esta bondad.

Pero al hecho de que esta cantidad ya es pequeña, los ácidos grasos esenciales se reducen aún más con una dieta que tiende a eliminar las grasas, teniendo como consecuencia que su consumo se encuentre por debajo de los niveles requeridos. Con el tiempo se desarrolla una falta de ácidos grasos esenciales. Esta deficiencia puede llevar a un funcionamiento anormal neurológico e hipertensión visual, desequilibrio hormonal, afectación en la buena cicatrización de heridas y el crecimiento celular, mientras que la falta de GLA puede causar artritis y el síndrome premenstrual.