Un aficionado del consumo cannábico por medio de pipas para fumar marihuana debe tener en cuenta que la limpieza de dicho utensillo es algo realmente importante. En muchas ocasiones, una pipa que ha sido utilizada en reiteradas oportunidades tiende a adquirir un sabor carácteristico  permannente y al momento de fumar esto impide que uno pueda apreciar el verdadero sabor de la hierba que se esta degustando, debido a la acumulación de sustancias que quedan impregnadas en la pipa uso tras uso. Por este motivo, en esta ocasión voy a brindarles ciertas indicaciones esenciales para una correcta limpieza del artefacto en cuestión.

La técnica para limpiar una pipa de marihuana es muy simple y para realizarla debemos contar con un poco de sal fina, algo de alcohol (70°-95° de pureza) y una escobilla limpiapipas o en su defecto un isopo para orejas.

El primer paso de la limpieza consiste en llenar con sal fina el orificio de la pipa donde va la marihuana, sin apretar demasiado y luego se debe añadir de a poco el alcohol, evitando que este desborde o salpique fuera de la pipa. Una vez realizado esto, hay que dejar la pipa en reposo por 24 horas para obtener una máxima limpieza, permitiendo que el alcohol se evapore por completo. La función del alcohol consiste en deshacer las sustancias no deseadas que quedan adheridas en el interior de la pipa, mientras que la capacidad de absorción de la sal absorve las sustancias impregnadas. Este proceso puede distinguirse claramente al cabo de unas horas ya que la sal comienza a tornarse marrón conforme va pasando el tiempo. Por último, vaciaremos la pipa para fumar marihuana por completo y terminaremos el procedimiento limpiando nuevamente la pipa con el limpiapipas, evitando así los restos indeseados que puedan llegar a quedar. Siguiendo estos simples pasos amigos, le garantizo que podrán saborear realmente lo que están fumando, siempre y cuando limpien la pipa con frecuencia.