[1]En las primeras semanas de crecimiento, es fundamental que la planta de maría [2] cuente con una buena mezcla de tierra que resultará determinante para su correcta evolución. En esta oportunidad les brindare un breve análisis de los sustratos mas importantes que no pueden faltarle a nuestras niñas.
Humus de lombriz
Es el producto de los residuos orgánicos digeridos por lombrices. Con una elevada carga microbiana, aporta al suelo ácidos húmicos y fúlvicos que aceleran la conversión a nutrientes asimilables.
Vermiculita
Es un mineral de estructura laminar. Retiene la humedad y los nutrientes, además de equilibrar y dar cuerpo a mezclas con un drenaje demasiado fluído. Es un elemento muy usado en cultivos hidropónicos [3] (en agua) y para clonación de esquejes [4].
Perlita
Es arena expandida por el calor. Es un elemento imprescindible en cualquier mezcla ya que favorece el drenaje, retiene el agua y funciona como aireador del sustrato.
Turba
Es vegetación en proceso de descomposición que se utiliza como corrector y medio para el crecimiento de la marihuana en nuestro caso. Hay dos tipos, la turba rubia (de PH ácido, pocos nutrientes y capaz de retener más de 15 veces su peso en agua) y la turba negra (de PH neutro, más rica en nutrientes pero con pésima capacidad de aireación).
Compost
Es un elemento obtenido artificialmente por la descomposición bioquímica de residuos orgánicos vegetales y animales. Resulta un abono muy rico en nutrientes y microorganismos que favorecen la asimilación de los primeros.
Harina de hueso
Es un subproducto de los mataderos. De asmilación y liberación muy lenta, es rica en fósforo y calcio. Resulta ideal para sustratos de floración.
Harina de sangre
Se obtiene por desecación de sangre animal. Contiene un gran porcentaje de nitrógeno a causa de la hemoglobina. Su uso se reserva principalmente para los sustratos de crecimiento.
Cantos/Piedras
Ubicadas al fondo de la maceta, crean una cámara de aire que cumple la doble función de drenaje y aislante
Arena
Cualquier tipo de arena servirá para mantener el sustrato drenado, suelto y ventilado. Algunos tipos aportan a la tierra una ligera acidez a la tierra. Las más recomendables son las arenas de rio.
[5]
Con respecto a la proporción de cantidades a utilizar de cada material, las combinaciones pueden variar en relación a la necesidad que presente la planta en ese momento y de acuredo a las preferencias de cada cultivador.